Este artículo discute diversas cuestiones relacionadas con los funcionarios y el orden en la prisión. Una prisión puede parecer ordenada por su régimen, su organización o sus prácticas, pero dicho orden quizás haya sido alcanzado mediante un control excesivo y sin el consentimiento de los internos. Es fácil confundir los términos ‘orden’ y ‘control’ en el contexto de la prisión pero, no obstante, la diferencia entre un orden basado en el control y un estado de orden aceptado en las prisiones es crucial.
Este artículo comienza exponiendo el problema teórico del orden en la prisión y analizando el rol tradicional de los funcionarios en relación al orden. A continuación, se presentan diversas formas de orden, tanto generales como específicas, observadas en una investigación etnográfica realizada en dos prisiones de máxima seguridad de Inglaterra. Los hallazgos de dicha investigación ilustran cómo las forma de conseguir y mantener el orden puede diferir dependiendo de cómo el personal utilice las políticas y los mecanismos de control que tiene a su disposición y, en dicho contexto, se expone el rol de los funcionarios en relación al orden y al control. Este artículo concluye presentando la experiencia de los internos en el contexto penitenciario actual. A través de sus experiencias, se ilustra la importancia de la distinción entre ‘orden aceptado’ y control y se sugieren algunas de las implicaciones de enfatizar el ‘control’ en vez del ‘orden’ en las prisiones contemporáneas.
Deborah H. Drake, «La contribución del personal de prisiones al mantenimiento del orden. », InDret 3.16